Con todo el boom del marketing digital y sobre todo, con esa idea (a mi juicio errónea) de que la comunicación digital y la presencia digital es algo que puede hacer todo el mundo, incurrimos en ciertos errores fundamentales. Yo siempre pienso en las marcas como mini ecosistemas que tienen unas condiciones determinadas, unos valores particulares y unas necesidades concretas. No todas las marcas son iguales ni impactan de la misma forma en el universo online. Y por eso, no lo puede hacer cualquiera.
Y por eso la comunicación digital necesita un know-how detrás. Si no lo aplicamos, es probable que cometamos errores que, en última instancia, puede traer consecuencias nefastas. Hoy te hablo de 5 errores en tu estrategia digital de marca que puedes estar cometiendo. Toma nota:
Es muy normal que una marca caiga en el maldito autobombo cuando se plantea su estrategia online. Este tema es peliagudo porque, obviamente, uno de los objetivos de la presencia online de una marca es dar a conocer sus productos o su nombre. Sin embargo, hacerlo en formato "martillo pilón" no es una buena idea. A la gente ahí fuera, a tu público, no le gusta hablar de ti, no le gusta que le digas lo maravilloso que es tu producto (aunque lo sea). Internet da la oportunidad al público o al cliente potencial de una marca de ser parte de un diálogo. Crea contenidos que pongan en valor tu producto, pero que a la vez sean útiles, relevantes y emocionantes para tu audiencia. Si no, tu estrategia de de marca se queda coja.
Tu marca nació porque querías cubrir una necesidad específica en tu cliente o resolver en él algún problema. Es importante que esto lo tengas muy presente en todas las acciones de tu estrategia online y, casi más importante, que sepas gestionar bien las expectativas de tu cliente. Recuerda que una promesa osada capta la atención de tu público e incluso, puede darte muy buenos resultados, pero no te pases. Deja claros los límites con tu cliente, deja claro hasta dónde puedes llegar. Si tienes una fórmula milagro, ¡genial! Pero si no la tienes, no hagas que tu cliente se cree expectativas erróneas sobre ello. Comunica con honestidad.
Recuerda: lo que se puede medir, se puede mejorar. Tatúate esta frase en un lugar visible y tenla siempre presente. Si no estás monitoreando las acciones que llevas a cabo en la estrategia online de tu marca, no tienes una estrategia. La analítica nos ayuda a medir el alcance de nuestras acciones, nos puede ayudar a plantear hipótesis sobre algo que ha funcionado muy bien, pero también sobre algo que no ha funcionado tan bien. Poder medir cada impacto de tu estrategia online te permitirá optimizarla y mejorarla, con el fin de mejorar también tu marca. Mucho cuidado con dar la espalda a la analítica. Algo puede salir bien por casualidad, pero necesitarás de las métricas si quieres replicar y sobre todo, escalar tus éxitos.
Un mensaje de marketing potente y definido te ayudará a mantener la coherencia en cada una de las acciones que hagas. Si no tienes este mensaje de marketing claro, no podrás plantear objetivos para tus acciones. Tu estrategia de marca será inconsistente y no impactará en tus clientes. Sobre todo cuando hablamos de Content Marketing, un mensaje de marketing claro y bien construido, te ayuda a crear y publicar contenidos con coherencia y las ideas muy claras. De esto te hablo en una de las lecciones de mi Audiocurso de Content Marketing, del cual puedes obtener más información AQUÍ.
El error de posicionamiento es mucho más común de lo que parece. Varias veces me he encontrado con marcas que definen a su cliente ideal de una forma muy concreta, pero que después atraen a un tipo de cliente totalmente distinto. Por ejemplo, queriendo dirigirse a un público con un poder adquisitivo alto mediante productos premium, pero aplicando descuentos brutales a sus precios por la urgencia de la venta. De esta forma, el mensaje que lazamos al mundo no es de producto premium, sino de producto barato. Y el cliente que está dispuesto a pagar poco, no es igual que aquel a quien no le importa pagar un producto premium si sabe que le aporta valor. Posicionar bien tu marca en un nicho de mercado y después, llevar a cabo las acciones de tu estrategia en consecuencia es fundamental.